No nos podemos aferrar, en estos momentos, a otra cosa que no sean los resultados. Quizás no sean los que queremos, pero cuando estás en una crisis tan profunda como la que vive el Sevilla en el plano anímico y futbolístico, el punto de Villarreal parece incluso hasta bueno tras el esperpento -una vez más- de Lopetegui y los suyos.
Lo que ocurrió en Castellón y sus respectivos porqués, las incoherencias del técnico con ciertos futbolistas, el nivel de la plantilla, la duda de si otro entrenador sacaría más puntos que Julen en las actuales circunstancias y los datos que ejemplifican el peor Sevilla de los últimos años en la segunda vuelta, los ejes del antepenúltimo programa de la temporada.