Como solía poner el gran @SalmonPalangana, escribo esto mientras escucho en bucle “Eso que tú me das” de Jarabe de Palo.
Ayer fue un día duro. Cuando más olíamos otra final, pasó lo que suele pasar al revés, nos “eliminaron” en el último segundo, con una concatenación de errores impropias de este Sevilla de Lopetegui.
No voy a entrar a valorar en detalle ni el árbitro ni el partido. El primero pudo hacer que cambiara el resultado y si las jugadas polémicas hubiesen sido al revés, probablemente, las hubiera resuelto de otra forma, pero no es el culpable de nuestra eliminación. Con respecto al segundo, no se puede pretender superar al Barcelona de Messi (por muy mal que digan que está) sin crear absolutamente nada de peligro, más allá del penalti errado por Ocampos.
No obstante, sobre esto podéis leer en la web https://sevillismo.futbol/ y en muchísimos sitios más.
Yo aquí he venido a hablar de “eso que tú me das”. Eso que me da el Sevilla, porque hoy todo serán frases al estilo “es que el planteamiento de Lopetegui”, “es que En-Nesyri no se fue al córner”, “es que Fernando hace una falta absurda”, “es que el despeje de Diego Carlos en la última jugada” …y así hasta que nos hartemos, y puede que todos tengan razón.
Sin embargo, a pesar de la tremenda decepción de ayer, yo quiero darle las gracias a mi equipo. Gracias por estar ahí, por luchar por grandes cosas. Gracias por, a pesar de estar jugando fatal, luchar hasta el minuto 93 para que viéramos otra final. Gracias por ilusionarme cada día. Gracias por hacer que me olvide de la situación que vivimos, aunque sean 90 minutos al día. Gracias por dar la cara cada tres días, a pesar de no haber tenido prácticamente descanso y seguir luchando en todos los frentes. Gracias por seguir queriendo más, a pesar de haber tocado plata hace meses.
Porque parece que se nos olvida que tocamos plata hace nada. Ayer poco más que éramos el peor Sevilla de la historia y empezaron a hacerme comparaciones odiosas con otros Sevillas anteriores y es que “cualquier tiempo pasado fue mejor”.
Llegué a leer por ahí que el Sevilla de Montella/Berizzo era mejor que este…y vale que llegamos a una final (el partido más lamentable que recuerdo en la historia del Sevilla) y a cuartos de Champions, y que cuando pase el tiempo se verá como un buen año, como pasa con el Sevilla de Maradona que con un equipazo no llegó ni a Europa; pero comparar cualquiera de estos equipos con lo que ha conseguido este Sevilla de Lopetegui, y espero que siga consiguiendo, es, cuanto menos, una temeridad.
Lo de ayer fue un varapalo grande, pero, como escribí el otro día, sevillistas levantaos porque no podemos permitirnos bajar los brazos, porque queda mucha liga por delante para conseguir la clasificación a Champions y porque todavía queda la vuelta en Dortmund, aunque el resultado de la ida fuera malo (de hecho, en esta curiosa afición sevillista, diría que son mayoría los que ven que se pueda pasar en Dortmund y que no nos clasificábamos a la final de copa).
A mi equipo siempre le exigiré que luche y compita al máximo cada día, habrá días malos como el de ayer, pero si algo caracteriza a nuestro equipo es que siempre se levanta, siempre lucha y todo lo que nos da y ha dado en estos años es inconmensurable. Ahora nos toca a todos, aunque no podamos ir al estadio, remar para que el equipo se levante y luche por los objetivos que quedan. Como canta Pau Donés en su canción por “todo lo que me das, te estaré siempre agradecido”, ahora nos toca a nosotros que el equipo nos diga “gracias a ti, seguí remando contra la marea”.
Y para acabar os dejo esta viñeta del gran @SevillaFComic que siempre recuerdo en días como hoy: