El técnico argentino, que llegaba el 6 de octubre para encomendar la misión de la salvación en su segunda etapa como entrenador del Sevilla FC, es cesado de su puesto después de 31 partidos.
Jorge Sampaoli, que se postulaba como un entrenador capaz de hacer la gran revolución por su filosofía de juego y su carisma, no ha llegado a darle un cambio de aires al equipo, que sigue sin competir y demostrando una apatía que parece natural. El equipo se inunda en la mediocridad, sus cambios y sus planteamientos han minado la moral a una plantilla que no levanta cabeza y parece haber perdido el horizonte. Sampaoli es cuestionado por la afición, por los propios jugadores que manifiestan partido tras partido su inconformidad y falta de química con la idea de juego y, para colmo, por la directiva, únicos valedores en los peores momentos. Contrarios a Monchi, que defendió hasta el último momento a Lopetegui, el presidente Pepe Castro y su mano derecha, Del Nido Carrasco, apostaron por el de Casilda como la solución a todos los problemas. Nuevamente se demuestra que son unos artistas, pero de la dimisión. Error tras error.
Jorge Sampaoli se marcha del Sevilla después de 31 encuentros en los que ha conseguido 13 victorias, 6 empates y 12 derrotas, además de un +6 en diferencia de goles. No obstante, sus últimos encuentros han manifestado de manera clara que, tanto él como los jugadores, son inexpertos en situaciones de crisis en las que se lucha por evitar el descenso. El candidato más claro y que será una realidad más pronto que tarde es José Luis Mendilibar, ex técnico del Éibar y experto en situaciones de crisis, capaz de hacer mucho con poco. También se informa que, a pesar de que su cláusula es de 11 millones de euros, el Sevilla FC pagará unos 5 millones de euros por el finiquito de Sampaoli.