Nadie niega que el Sevilla FC realizó ayer uno de los mejores partidos de la temporada. Es innegable y evidente que los pupilos de Julen Lopetegui empiezan a encontrar esa identidad que estaba vigente en el equipo la pasada temporada y la anterior. Insistir y profundizar por las bandas, estando muy activos en las recuperaciones y ayudas defensivas, y siendo contundente al corte y muy perseverante en la fiabilidad defensiva.
Sea como fuere, la poca eficacia y minuciosos detalles hicieron que el Real Madrid se plantara vivo hasta los últimos compases del encuentro y con un Vinicius que fue anulado completamente gracias a un gran marcaje de Montiel-Jordán, la primera que tuviera la primera que empalara a portería.
Aún así no hay que ser escépticos, el conjunto hispalense cayó en el Bernabéu de nuevo, pero con la cabeza muy alta y los datos dejados en el verde dan a decir el gran partido que cuajaron y la regularidad que está consiguiendo la plantilla, una de los objetivos, seguir en esta dinámica de buenas sensaciones y buenos resultados.
Un Sevilla recuperador y muy considerable en las ayudas
Pese al clamoroso fallo de Bono ante el remate desde 33 metros de Militao, el Sevilla ejecutó en el día de ayer 14 recuperaciones en campo rival en lo que se traduce como el partido con más recuperaciones en lo que va de Liga.
Eso le permitió poder proyectarse en ataque rápido y hacer quebrar un mediocampo del Madrid que estuvo muy desaparecido en la mayor parte del partido.
Para esas recuperaciones en tres cuartos de campo el conjunto hispalense coordinó una gran presión, no muy alta pero si muy eficaz. Fue capaz de estar muy activo tanto en la primera línea de presión como la segunda, donde tanto Lucas Ocampos como Joan Jordán fueron los dos jugadores que más presionaron en tres cuarto de campo, con 25 y 20 veces respectivamente.
Sumando a eso, hay que destacar considerablemente las ayudas que se dieron constantemente en el partido tanto en los costados exteriores como en pasillos interiores
El hecho de que el Real Madrid no profundizara por la banda con Vinicius y Carvajal se debe al hecho de que los extremos, Lucas Ocampos y Papu Gómez, estuvieron constantemente replegando hacía atrás para que no se creara superioridad por esta misma.
Misma situación se dio con la figura de Karim Benzema. El internacional francés cuajó su peor partido de la temporada en el sentido de que fue marcado individualmente tanto por Jules Koundé que siguió su sombra constantemente al igual que Fernando y Jordán. Esto hizo que tanto en el balón parado como en las segundas jugadas el francés no pudiera hacer nada. Tan solo hay que reseñar su mentalidad picaresca en el primer gol del conjunto madridista.
Profundizar en la banda como estilo de vida
En el día de ayer los pupilos de Julen Lopetegui tuvieron un único fin para atacar. Llevar a cabo una circulación rápida que permitiese esta misma profundizar mucho por los costados para generar centros laterales o jugabas combinativas por los costados entre lateral-extremo.
Tanto por la izquierda como por la derecha Montiel y Acuña pudieron proyectarse en ataque sin tener que esmerarse mucho en replegar rápido ante la muy inteligente cobertura y repliegue defensivo que hizo el Sevilla colectivamente, un factor muy fundamental en partidos con equipos que salen muy rápidos tras una acción ofensiva de su rival.
Aquí os mostramos una gran gráfica proporcionada por OptaJose que muestra dde manera muy clara la profundidad que generó el Sevilla por ambas bandas y los constantes pases verticales que generó al área del Real Madrid.
Con esto también resaltamos la insistencia y persistencia que el conjunto de Julen Lopetegui tuvo a la hora de atacar, donde tendría un amplio abanico de recursos para cargar el área del Real Madrid, con movimientos interiores, llegadas en segunda línea de los Rakitic, Joan Jordán y Fernando, las diagonales interiores de Ocampos y la incidencia interior del Papu Gomez.
Sin un plan B muy eficaz
Para el partido de ayer, la enfermería rojiblanca estaba plagada de jugadores. A eso hay que sumarle que varios jugadores que fueron titulares iniciales como son Lucas Ocampos, Jules Koundé o Diego Carlos arrastraban molestias.
Sea como fuere, en materia táctica y futbolística, el hecho de no disponer de jugadores como Lamela, Suso o En-Nesyri hizo que el intervencionismo de Julen Lopetegui fuera menor con respecto a otros partidos.
Es por ende que el Sevilla tuvo que aguantar la mayor parte del encuentro con un mismo once y eso quieras que no se vio reflejado en el equipo, el cual bajó la intensidad física en una segunda parte que durante los últimos minutos fue un arreón blanco.
No en vano, los cambios del Sevilla no cuajaron en el partido frente a unos cambios madridistas que por el contrario si lo harían.