Una de las claves del éxito del Sevilla en este último tramo de competición liguera y europea ha sido el rendimiento exponencial que ha demostrado Loic Badé desde que se asentó como líder de la retaguardia defensiva.
El central francés le ha ofrecido las garantías suficientes a Mendilibar para conformar, con un excelso Gudelj, un entramado defensivo que ha permitido al Sevilla FC volver a ser un equipo competitivo y los últimos meses lo avalan, con la consecución de la séptima UEFA y haberse desquitado de los puestos de descenso de manera rápida y efectiva.
Su llegada en Enero generó mucha incertidumbre a la hora de ver su poco ritmo competitivo puesto que su estancia como cedido en el Nottingham Forest no fue la más deseada para el joven central galo. Sin duda alguna, la apuesta de la dirección deportiva ha sido un acierto en toda regla y el rendimiento visto este segundo tramo de liga y su proyección, prevén, a priori, un jugador muy revalorizable de cara al futuro.
De hecho, según Olocip, el central francés va a crecer como activo en el mercado esta próxima temporada, incrementando su valor de mercado hasta los 17 millones de euros. No obstante, ha firmado un contrato con el club hispalense hasta 2027.


Oficio, anticipación y margen de mejora
Desde que se asentó Loic Badé, el central ha ido creciendo en aspectos como el salir de zona, la anticipación al rival, el juego aéreo y la distribución desde atrás.
Pero todo, con un denominador común: el oficio.
El ex central del Stade Rennais ha demostrado en poco más de 5 meses ser un jugador con cualidades tecnico-tacticas idóneas para poder convertirse en el jefe de la zaga defensiva la temporada que viene con Mendilibar en el banquillo.




En cuanto a cualidades defensivas, ha cortado la sangría en gran parte gracias a su concentración a la hora de estar en sitio, temporizar para achicar espacios y medir el timming para ir al corte, anticiparse al rival en duelos defensivos donde es el jugador del Sevilla que más ha ganado en ese aspecto y en La Liga el que más duelos terrestres con calidad ha ganado.




Por otro lado, al estar en un sistema defensivo más protegido y con ayudas, Badé ha podido demostrar su capacidad para salir de zona y encimar a los jugadores referencia de los rivales, saltar a la presión del mediocentro que recibe entre líneas y así, no dejarle progresar con balón en la frontal del área.




No obstante, después lo fundamentaremos en los datos, en el juego aéreo tiene mucho margen de mejora. Pese a tener un gran dominio de juego aéreo, puede ser más dominador por su gran físico; 1.91 metros de altura.




Predicción de rendimiento de cara a la siguiente temporada
No hace falta sacar más fotos del rendimiento de Loic Badé para darnos cuenta que su eclosión en el conjunto hispalense ha sido muy temprana. La adaptación a un contexto de equipo que estaba luchando en los puestos de descenso ha sido excelsa pero hay que ir más allá.
Gracia a Olocip, podemos ver que la predicción de rendimiento de Loic Badé para la siguiente temporada va a ser excelsa. Según la base de datos contextualizada al Sevilla FC, es mejor que el 82% de los centrales. No obstante, cabe recordar que siempre es una predicción, hay factores subjetivos que siempre están presentes, véase una lesión etc…


Profundizando en esta gráfica hay que recalcar aspectos como los duelos aéreos, tanto ofensivos como defensivos, donde a priori, crecerá notablemente o en las segundas jugadas, donde su mejoría hará que las lea mejor.
Sin embargo, según Olocip, en términos de pases al hueco, recuperaciones o balones bloqueados habría una pequeño bajón de nivel partiendo de la base de un central que ha demostrado un rendimiento muy bueno estos últimos 5 meses y que va a comenzar una temporada desde cero en el Sevilla FC.
Sea como fuere, y ya bajo mi punto de vista, siempre me ha faltado por ver en el Sevilla las conductas de Badé en la distribución desde atrás que ya demostró en el Lens. Es un futbolista muy valido a la hora de ejecutar conducciones hasta campo contrario o dar pases progresivos que rompan líneas y, en ese sentido, todavía le falta por demostrar en el conjunto hispalense.
Incidiendo en la comparación con sus antiguos equipos, hay dos factores claves: el valor generado en las acciones defensiva y en construcción de juego. Con muchos menos minutos en el Sevilla, algo obvio ya que llegó en Invierno, Badé ha generado más valor en acciones defensivas que en la temporada 20/21 en el Lens.


En cuanto a construcción de juego, más concretamente en las conductas de Badé en la distribución desde atrás, si es cierto que el estilo de Mendilibar no es lo más óptimo para ver esas conductas de Badé, a sabiendas de la fases de iniciación (salida de balón) de los equipos de Mendilibar y que ya los sevillistas han comprobado de primera mano.
Estadísticas que avalan
Ha sido el segundo mejor jugador defensivo del equipo por detrás de Gudelj y las estadísticas lo avalan. En duelos defensivos terrestres ha dominado todo los registros, además de destacar en los duelos aéreos, tanto a nivel ofensivo como defensivo, donde puede seguir progresando por su poderoso físico.


Influencia indirecta en Gudelj y Fernando
Más allá de su rendimiento individual, el asentamiento de Badé en la retaguardia defensiva permitió que Fernando Reges estuviera presente en el mediocentro aportando criterio, inteligencia táctica e influyendo directamente al equipo, algo que se perdió cuando el brasileño estaba obligado a jugar de central por bajas o decisiones técnicas.


Al igual que le ha ocurrido a un Gudelj que ha visto en la figura de Badé un socio perfecto para crecer en la solidez defensiva. Su compenetración ha conformado un sistema defensivo mucho más protegido, con ayudas, coberturas entre ambos, inteligencia para salir de zona.
El fránces, visto lo visto esta segunda parte de la campaña liguera y europea, está llamado a ser el hombre insignia de una retaguardia defensiva que necesitaba como el comer un líder tras la marcha de Diego Carlos y Jules Koundé.