Nuevo once revolucionario el que sacaba al verde Julen Lopetegui, con hasta seis cambios con respecto a los futbolistas que perdieron en el Power Horse Stadium frente al Almería. Destacaron las ausencias de Jesús Navas y Papu y la del canterano José Ángel Carmona, que saltaría al verde en el segundo tiempo y se convertiría en lo mejor del equipo, en el centro de la defensa acompañando a Nianzou, así como la primera titularidad de Isco con la casaca sevillista.
El juego del Sevilla en este inicio de temporada se ha convertido en el cuento de la buena pipa. Tras un buen inicio en el que el equipo dominó y monopolizó las ocasiones de peligro, el grupo baja los brazos y comienza a conceder ocasiones que, en este encuentro y en los cuatro de esta temporada, acaban por costarle caro. La definición y el gol sigue siendo la gran asignatura pendiente de un Sevilla FC que genera muchas ocasiones pero que ni sus delanteros, en este caso En Nesyri, ni los futbolistas de segunda línea que tantos goles han dado al equipo no son capaces de materializar. Pronto comenzaron estas ocasiones, con un magnífico pase de Isco a Rakitic desde el balcón del área, con un disparo que se marchaba fuera tras una prodigiosa mano de Ter Stegen a los cuatro minutos de partido.
La estrategia de la escuadra sevillista en los primeros compases del encuentro fue la de buscar las espaldas de la zaga blaugrana a través de pases largos para así golpear con velocidad a un Barça que se vio ayudado del mal posicionamiento de los futbolistas del Sevilla FC, que los condenaba ocasión sí y ocasión también al fuera de juego. Hasta cuatro en el primer tiempo por ninguno del FC Barcelona. Tras 20 minutos de dominio absoluto de los sevillistas, llegaría ese punto de inflexión ya habitual que terminó por noquear al equipo. Una pérdida de Joan Jordán en el centro del campo propició una contra del Barça en botas de Dembelé, que conectó en la frontal del área con un Lewandoski que superó a Bono picando un balón, salvado por Fernando en línea de gol, pero que Raphinha enviaba al fondo de la red en segunda jugada.
Un gol que terminó por mandar a la lona a un Sevilla FC con mandíbula de cristal que sigue siendo incapaz de sobreponerse a las adversidades, la segunda de ellas a los 35 minutos del primer tiempo, cuando Koundé desde la medular envió a Lewandoski una pelota a los pies que acabaría en el fondo de la red sevillista, sentenciando a un Sevilla FC que volvió a bajar los brazos demasiado pronto.
Un proyecto caído en desgracia
En la segunda parte el fútbol se esfumó y se sacaron a relucir las causas por las que el proyecto deportivo que lidera Julen Lopetegui está completamente agotado. Dejando atrás el apartado técnico, con una línea defensiva cuyo nivel ni se acerca al de la pasada temporada, acabando por completo con los cimientos del equipo que tan solo encajó cuatro derrotas la pasada campaña (son ya tres esta temporada); un centro del campo con un físico infinitamente inferior al del resto de rivales; y una línea de ataque sin gol, y sin atisbos de que ese gol vaya a llegar; hay que destacar la actitud de un equipo que se achica rápidamente ante cualquier rival.
Una actitud acompañada de un entrenador como es Julen Lopetegui que no mejora al equipo con los cambios y que ha empeorado un bloque que la temporada pasada destacó por la dificultad tanto para hacerle goles como para encajar derrotas. Un proyecto baldío, empeorado por una planificación, encabezada por Monchi, que no ha cubierto las necesidades básicas del equipo. Un equipo que puede ser herido de muerte el próximo martes cuando reciba al mayor goleador de Europa como es Halaand y que ve con serias dificultades la consecución de un objetivo como es la Liga de Campeones que se presenta cada vez más complicado.
Este Sevilla FC actúa de un sparring con mandíbula de cristal ante cualquier rival que se le ponga por delante, exaltando las virtudes de quien tiene enfrente y acrecentando aún más sus debilidades. Un proyecto que ha tocado fondo, exigiendo un reseteo urgente en una plantilla completamente alejada de su nivel. Sin goles, actitud y físico, no hay paraíso,
Ficha técnica
Sevilla FC: Bono, Montiel (Suso, 623), Gudelj (José Ángel Carmona, 45′), Nianzou, Acuña, Fernando, Jordán (Delaney, 45′), Rakitic, Lamela, Isco (Papu Gómez, 70′), En-Nesyri (Dolberg, 56′).
FC Barcelona: Ter Stegen, Araujo, Busquets, Dembelé (Ferrán Torres, 63′), Pedri (De Jong, 63′), Lewandowski (Ansu Fati, 73′), Raphinha, Koundé, Eric, Balde (Jordi Alba, 62′), Gavi.
Árbitro: El colegiado del Comité Madrileño Antonio Mateu Lahoz amonestó a Dembelé (9′), Balde (28′), Jordán (32′), José Ángel (65′), Araujo (74′), Sergi Roberto (88′).
Goles: Raphinha (0-1, 20′), Lewandoski (0-2, 35′), Eric García (0-3, 50′).