El Sevilla se va pareciendo a lo que quiere Julen Lopetegui. Guste más o guste menos, el vasco ha detenido la sangría de goles encajados en el comienzo de la temporada. En su libreto parecen ir encajando las piezas y ante el Villarreal, como ante el Espanyol, vimos a un equipo reconocible para lo bueno y para lo malo. Óliver Torres ilusionó al sevillismo en una primera mitad contundente hasta el fatídico paso por el túnel de vestuarios.
Ni el Barça, ni el City ni tampoco el Villarreal son rivales propicios para el arranque que ha tenido la plantilla sevillista, en una reestructuración identitaria considerable fruto de una pésima planificación y de las clásicas ventas. La leve mejoría de los dos últimos encuentros era lo único a lo que agarrarse para soñar con una victoria ante el cuadro castellonense, ahora afincado en el Ciutat de Valencia mientras terminan las obras en La Cerámica. El Sevilla tenía que ser lo que siempre ha sido para rascar algo ante los de Emery.
Sin abandonar la tendencia de esta 22/23, Lopetegui superó a su homólogo vasco en la primera mitad. Recuperando las señas de identidad de su libreto donde la eficacia y el dominio de las áreas es innegociable, Óliver Torres adelantó a los nervionenses antes de los primeros diez minutos. El extremeño, pieza inamovible en la competición doméstica, brilla cada vez que se enfunda la camiseta sevillista y se asocia con Isco Alarcón, los jugadores que abren las aguas en este Sevilla sin capacidad de ser continuo en ataque. Es una cuestión de individualidades, como lo ha sido desde que Lopetegui se sienta en el banquillo sevillista, lo que hace funcionar al equipo en ataque.
Con la primera de las variables funcionando, la segunda tenía que darse para poder amarrar la victoria. El vasco ha encontrado en Kike Salas y Gudelj, MVP del partido, su pareja de centrales. Ha agitado el árbol hasta que parece haber dado con la tecla. Ahí tenía que decidirse la segunda victoria de la temporada ante uno de los mejores equipos de LaLiga y estuvo en el camino. El Villarreal iba a ir a más con el paso de los minutos y, además de las apariciones de Jackson y Baena, el Sevilla tenía que lidiar con las incontables pérdidas de Joan Jordán y la fatiga de Fernando. Acabó entero los primeros 45 minutos, con alguna que otra ocasión de Óliver Torres y un disparo al larguero de Parejo desde la frontal.
El paso por el túnel de vestuarios volvió a decantar la balanza. Por el equilibrio, ese que ha llevado el Sevilla de Lopetegui por bandera en las tres campañas anteriores, pasa el puñetazo encima de la mesa del equipo. Fernando, tocado, y Bono, lesionado, se quedaron en la caseta y la ausencia de pivotes hizo que saltara Nianzou para ocupar esa demarcación, durando menos de diez minutos. En la primera cabalgada amarilla por el centro se le vieron las costuras y Baena, que pasaba por allí, puso el empate en el 51′. El francés, de momento, que se quede en el centro de la zaga a pesar de sus condiciones innegables.
Lopetegui logró que su equipo sobreviviera ante el Villarreal, que tuvo más de dos y de tres ocasiones para superar a un Dmitrovic que sigue sin perder cuando le toca jugar. Acuña sacó un balón en la misma línea, Telles cometió un penalti que no se acabó señalando por fuera de juego y Danjuma, en el 90′, la mandó arriba. Papu Gómez tuvo un par de ocasiones, pero está en el peor estado de forma que se le recuerda desde que llegó a Sevilla.
No se puede negar la mayor de que no haya mejoría en un Sevilla que ha cambiado desde la jornada 1, pero no es la situación que todos preveían a comienzos de la competición. Lopetegui agita el árbol en cada partido casi y no encuentra ese equilibrio que haga que su equipo haga 90 minutos completos. Se están recuperando, para bien o para mal, las bases de su filosofía. ¿Le dejarán más tiempo?
FICHA TÉCNICA
Villarreal CF: Rulli; Kiko Femenía, Albiol, Pau Torres, Pedraza (82′, Mojica); Capoue, Parejo; Coquelin (58′, Danjuma), Lo Celso (31′, Baena), Chukwueze (58′, Pino) y Jackson (82′, Morales).
Sevilla FC: Bono (45′, Dmitrovic); Carmona, Gudelj, Kike Salas, Acuña (68′, Telles); Fernando (45′, Nianzou), Jordán, Isco (68′, Suso); Navas, Óliver Torres (82′, Papu Gómez) y Rafa Mir.
Goles: 0-1 (8′, Óliver Torres), 1-1 (51′, Baena).
Arbitraje: Hernández Hernández (Comité Canario). Amonestó a Baena en el Villarreal. Vieron amarilla en el Sevilla Bono, Gudelj, Acuña, Carmona y Telles.