Hace dos meses hablábamos en Sevillismo sobre el Borussia Dortmund, el rival de hoy del Sevilla FC en la UEFA Champions League. Un equipo que acababa de cambiar de entrenador, pero que venía de hacer una notable primera fase de competición europea. La situación pasadas estas ocho semanas para el equipo alemán es complicada, ya que encadenan unos resultados que para nada son óptimos. Así, desde mitad de diciembre ha logrado 6 victorias, 2 empates y 5 derrotas tanto en la Bundesliga, en la que va sexto clasificado a 16 puntos del Bayern de Munich, y a 6 puntos de la cuarta plaza que da opción a jugar la máxima competición europea. Para un grande, que es campeón de Europa, es una situación complicada, y sobre todo pone a la entidad con el foco principal en la Champions. Por ello el combinado teutón llega a Sevilla dolido y con muchas ganas de demostrar su calidad.
Y es que el Dortmund, que sigue siendo entrenado por Edin Terzic hasta final de temporada (ya que le sustituirá Marco Rose, del Borussia Mönchengladbach), tiene ese don de gran equipo sea el momento que sea. Por ello se le puede categorizar en este partido como un lobo con piel de cordero. Da igual lo mal que esté jugando, las ocasiones que desaproveche, los errores defensivos o incluso las bajas. tiene suficiente calidad para romper una eliminatoria europea a su favor en menos de 45 minutos. A la archiconocida calidad de su máximo exponente, Erling Haaland, se le suman varios pilares como son Marco Reus, Jadon Sancho y Giovanni Reina. Jugadores de máxima calidad, que tienen capacidades para triangular a partir de tres cuartos y dar más de un dolor de cabeza a la defensa sevillista.
Pero no sólo queda ahí la cosa, para la cita recuperan al lateral derecho Thomas Meunier, ex del PSG, que ha estado lesionado y que durante cuatro citas ha dejado la banda derecha un poco huérfana. Tanto es así que Terzic ha usado en esa demarcación al español Mateu Morey incluso al centrocampista Emre Can. Habrá que tener cuidado de las internadas por banda del internacional belga, que si no entra en el once es por el hecho que no esté recuperado al 100%.
Entre los puntos débiles del equipo germano, la baja de su portero titular, Roman Bürki, con un golpe en el hombro. Algo que hará que juegue de inicio Marwin Hitz, veterano guardameta que ha sido cuestionado por sus últimas actuaciones. En defensa tampoco podrá contar con Zagadou, central de gran calidad y que hacía pareja en muchos partidos con Manuel Akanji. De ahí que el veterano Matt Hummels sea esta noche titular. El lateral izquierdo tiene una plaza fija, la de Raphaël Guerreiro. El portugués tiene una calidad enorme y no es de extrañar que suba la banda con la misma asiduidad que, por ejemplo, hace Jesús Navas en el Sevilla.
En el medio del campo, otro de los elementos negativos que contempla el equipo alemán es la baja de Axel Witsel, con rotura del talón de aquiles. Sin embargo, Terzic tendrá mucha calidad para sustituirlo. El hombre clave es Thomas Delaney, que no viajó a Sevilla ayer por ser padre, pero se le espera a lo largo del día de hoy. El americano formará junto al jovencísimo Jude Bellingham, algo que ha sido normal esta temporada, a no ser que prefiera la veteranía, no por edad, sí por partidos importantes, de Dahoud o Emre Can.
Mientras que en el ataque, cuatro nombres anteriormente mencionados, Haaland, Reus, Sancho y Reyna. Ese será el verdadero quebradero de cabeza del Sevilla. Lopetegui tendrá que cuidar las incursiones tanto por banda como por el centro de Sancho y Reyna, además de los desmarques de Reus. Sin olvidar que Haaland es el típico delantero centro que si recibe a partir del punto de penalti sin ningún tipo de oposición, termina logrando un tanto. Este Bono bajo palos, o al portero que recuerden.
Así, por lo tanto quedaría una alineación tipo en la que Hitz estaría en la portería; Meunier y Guerreiro por bandas, Akanji y Hummels en el centro de la defensa; doble pivote con Bellingham y Delaney, o Emre Can si no llega el americano. Y arriba Reus, Reyna, Sancho y Haaland.
En resumidas cuentas, el Sevilla se enfrenta a un Borussia Dortmund que, por calidad, podría estar fácilmente entre los ocho equipos con mayor potencial ofensivo de Europa. El Sevilla sabe que la Champions es especial, por lo que todo el análisis previo que se haga puede quedar en agua de borrajas. Por lo que es mejor tener atado en corto a este titán para que no desate toda su furia en una cita tan especial para la historia del Sevilla, como esta.