Como muchos ya hemos escuchado, la mejor defensa es un buen ataque. Actualmente, en el fútbol que hoy vivimos, muchos equipos planifican y configuran sus plantillas en torno a una defensa y una portería sólida y ya en ataque ser muy eficaz. Véase el ejemplo más claro en el Lille de la pasada temporada, el cual arruinó el periplo de un PSG que hacía aguas en defensa.
Y es que el Sevilla FC, en cuanto al nivel de portería y retaguardia se refiere, custodia una de las mejores del viejo continente europeo. Concretamente en los cancerberos, donde actualmente están el recién llegado de este verano, Marko Dmitrovic, un guardameta infravalorado por muchos, pero un total conocido de los desconocidos. Y a su lado, Yassine Bounou, que tuvo como punto de partida aquel partido ante el Cluj y que le tomo el relevo por completo a Tomas Vaclik, debido a su tan incansable lesión de rodilla.
Ambos, en lo que llevamos de temporada, contando también la pretemporada. han logrado que el Sevilla FC tan solo encaje 6 goles en 9 partidos, y contra rivales muy ofensivos como son la Roma y el PSG en pretemporada, y el Salzburgo hace apenas 2 días.
Las estadísticas no engañan lo visto
No obstante, además de los goles, ambos empiezan a batir récord y registrar número de porteros de alto nivel. Por ejemplo, en la primera jornada de la Champions League, según nuestro compañero LaLigaenDirecto, Bono fue el guardameta que más paradas exitosas realizó (7). No en vano, no hay que olvidar que el año pasado Bono estuvo hasta el último tramo de la Liga luchando por hacerse con el trofeo Zamora, que finalmente se lo acabaría llevando Oblak.
Si seguimos tirando de estadísticas, el año pasado, según Fbref.com, Bono fue el segundo portero que más porcentaje de porterías a cero tuvo, con un 45.5%. Y este año va por ese camino. En las 4 jornadas que se han disputado de la liga, es el cuarto portero con más porcentaje de porterías a cero, un 50% justo.
También, el año pasado se colocó como el tercer portero con mayor porcentaje de salvadas exitosas, con un 76% y el tercero que menos goles en contra cada 90 minutos le encajaban, con un 0.85.
Sea como fuere, lo que importa es el presente y el pasado, pasado está. Ahora Bono tiene que seguir el camino que realizó el año pasado, y para ello tendrá de compañero a un Marko Dmitrovic que va a implantar una gran competitividad en la portería, no como el año pasado ocurría con Tomas Vaclik
Un gran cambio con respecto al pasado curso
Si echamos la vista a la pasada temporada, podemos notar un gran nivel de diferencia en cuanto a los porteros se refiere. Con Tomas Vaclik y Bono en portería, cada vez que Lopetegui rotaba de cancerbero en las primeras eliminatorias de la copa o en algún que otro partido de grupo de la Europa League, con Vaclik en portería, era un suplicio para el equipo. Concedía mucho atrás, erraba en la salida de balón, en los córners no medía los tempos para salir o despejar. Claramente un gran problema para el técnico vasco que no veía otra solución posible, al no confiar plenamente en la cantera.
Aún así, todavía es temprano para ver la evolución de un Marko Dmitrovic que por lo poco que vimos ante el Rayo vallecano y en la pretemporada ante la AS Roma, la UD Las Palmas y el Country City, va a dar mucha guerra en portería y eso, a fin de cuentas, beneficia a un Sevilla FC que con lod fichajes que ha realizado, ha subido el nivel del tan clamado “equipo B”.