Volver a hacer del Jesús Navas un fortín. La abrumadora derrota en el Johan Cruyff ante el Barça B no debe distraer al Sevilla Atlético del cada vez más difícil objetivo de mantener la categoría. Y el primer paso es mostrarse fuerte como equipo en casa y aprovechar el calor de los aficionados que acuden cada semana a la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios.
El empate ante el Nàstic de Tarragona en el último encuentro disputado en casa muestra que este equipo puede mostrar otra cara en la parcela defensiva, distinta a la vista el pasado sábado en Barcelona. Pero no todo pasa por ser sólidos y ordenados atrás. En el plano ofensivo, preocupa el poco peligro que genera a los rivales. En la derrota ante el Barça B, el equipo solo sumó un disparo a portería, con un tiro lejano del lesionado Carlos Álvarez, que no estará este domingo con el equipo.
En frente, un CF Andorra, situado a las puertas de los puestos de promoción de ascenso, que ha sido capaz de mirar de tu a tu a los equipos punteros de la categoría, pero que ha fallado en momentos claves a la hora de dar un golpe encima de la mesa y luchar por el ascenso. El cuadro que dirige el ex bético Eder Sarabia suma cinco victorias, tres empates y tres derrotas, con un golaveraje positivo de tres goles. Viene de vencer en casa al Nàstic por dos goles a uno en un encuentro en el que los andorranos fueron superiores.
El Sevilla Atlético debe mostrar su cara más fuerte y efectiva en casa para comenzar así a levantar cabeza y hacer de la difícil misión de permanecer en la categoría de bronce del fútbol español una posibilidad, a pesar del gran lastre de derrotas que le acompaña.