Si algo ha fallado en el Sevilla FC esta temporada ha sido el centro del campo. La sombra de Éver Banega es demasiado larga para taparla con figuras como Rakitic o el Papu Gómez, que no pueden acaparar la multitud de funciones que hacía el de Rosario en su último periplo en Nervión.
Las dos últimas temporada del argentino en Nervión fueron similares estadísticamente pero no sobre el campo. Con Machín tuvo un rol de ‘5’, partiendo desde el doble pivote junto a Mudo Vázquez y tenía una clara responsabilidad defensiva que el argentino tuvo que acarrear. No desentonó en esa zona, pero vimos al Banega más trabajador que determinante. Sus goles, tiros y llegadas al área se redujeron considerablemente a cambio de este trabajo en la sombra, una labor que le acarreó muchas críticas por la cantidad de tarjetas amarillas que vio en esa temporada (un total de 22 amonestaciones).
Con la llegada de Julen Lopetegui y Monchi, la estructura que crearon ambos le daba alas a Banega. Tener por detrás a un futbolista de contención como Fernando Reges y a Jordán como escudero le otorgaron esa creatividad que necesitan los genios para brillar. Mucho más cerca del área, siendo determinante en tres cuartos y pudiendo descolgarse en ataque o hacia los costados hicieron que el argentino se marcase una de las temporadas más destacadas de su carrera.
El Big Data de Alebia Analytics nos muestra que Trigueros, en esta campaña con Unai Emery, y Zielinski, la temporada pasada, son los futbolistas que más se acercan a Banega, teniendo un 93.7% de similitud ambos futbolistas con el argentino. Contando que el Villarreal es un rival directo del Sevilla por esa cuarta plaza, el fichaje del centrocampista polaco sería, hipotéticamente, más factible para los de Lopetegui.
Valorado en unos 45 millones de euros -una cantidad desorbitada hoy día para los sevillistas- Zielinski llegó a Nápoles en la 16/17 procedente del Udinese por 16 ‘kilos’. Siendo un fijo para todos sus entrenadores en estos 5 años, los 23 goles y 19 asistencias que acumula en liga en este tramo hablan de la calidad que atesora el internacional con la Selección de Polonia.
Hablamos de Zielinski y no de Trigueros porque, a priori, encajaría perfectamente en el ecosistema Sevilla FC. Al margen de la adaptación, paso vital para que estos futbolistas encajen en el sur, los estilos del Nápoles de Gattuso y del Sevilla de Lopetegui fueron muy similares. Destacando los nervionenses en el juego defensivo y la intensidad, el Nápoles se mostró algo más contragolpeador y más agresivo en la presión en la pasada temporada. Mucho que ver tiene, también, el perfil de la plantilla italiana en el apartado ofensivo, con hombres como Insigne, Osimhen, Mertens o Elmas, que le favorece ese contexto.
A pesar de que ambos futbolistas se escaparían económicamente, el punto débil del Sevilla FC 20/21 ha sido esa pieza que juegue y haga jugar a las demás. Rakitic no ha sido ni lo será a estas alturas un sustituto de Banega y Lopetegui ha echado en falta a un futbolista de las características del argentino. Con la llegada del Papu Gómez podría virar hacia otro sistema e intentar que el ex de la Atalanta asuma otro papel, así como los dos pivotes que le acompañarían, pero el caso es que el técnico vasco necesita alternativas y estas serían, a priori, las más parecidas al ojito derecho del de Asteasu la pasada campaña.