Los sevillistas buscan su primera victoria como local en LaLiga ante un Rayo Vallecano que aterriza en Sevilla en uno de sus mejores momentos. Después de conseguir el primer triunfo en el Ramón Sánchez-Pizjuán el pasado martes ante el Copenhage, Jorge Sampaoli buscará mantener la inercia y seguir construyendo un estilo todavía por consolidar.
A pocas semanas de la llegada de la Copa del Mundo, los de Jorge Sampaoli cuentan con tres partidos fundamentales para intentar ―más allá de construir una idea de juego― escalar posiciones en la tabla. Rayo Vallecano, Real Betis y Real Sociedad serán los rivales en unas jornadas decisivas.
Los de Iraola llegan a Nervión como uno de los equipos más consolidados del torneo. Tras golear al Cádiz en el último encuentro en Vallecas, los rayistas llegan en la zona cómoda de la tabla, con quince puntos acumulados y menos urgencias que los sevillistas. El técnico vasco, que acumula tres jornadas seguidas sin perder con solo dos goles encajados, cuenta con las bajas por sanción de Óscar Trejo y de Randy Nteka, además de los lesionados Radamel Falcao y de José Ángel Pozo.
En el lado local, la enfermería rojiblanca ha recibido más visitas de las esperadas esta última semana. En-Nesyri será baja segura para el partido, además de las ya conocidas de Fernando Reges y Tecatito Corona. Isco Alarcón, Yassine Bonou y Karim Rekik, a pesar de haber entrado en la convocatoria, están a la espera de evolución en las próximas horas.
El propio Jorge Sampaoli asumía en rueda de prensa que se enfrentan “un equipo consolidado y uno en fase de consolidación”. El de Casilda aún se encuentra buscando ese estilo que haga un Sevilla reconocible. Más allá de la prosa de sus discursos y de su claridad a la hora de explicar la situación del equipo, la realidad es que, quitando el partido en Dortmund, los sevillistas aún guardan automatismos de la era de Julen Lopetegui.
Tiempo, elemento tan necesario como inexistente, es lo que sigue necesitando el Sevilla FC de Jorge Sampaoli para construir una nueva identidad. Con más partidos que entrenamientos, cada duelo es una oportunidad de seguir creciendo ante la inminente llegada de la Copa del Mundo.