Ni el Sevilla FC va a ganar LaLiga ni la va a pelear. La euforia del comienzo de temporada solo sirve para darse un golpe con la realidad. Los de Lopetegui cayeron ante el Eibar gracias a un solitario gol de Kike García al final del primer acto para incidir en el mal comienzo de temporada sevillista, que firmaron un partido nefasto a merced de un planteamiento poco inteligente del vasco ante un equipo como el de Mendilibar. La segunda derrota consecutiva en LaLiga empieza a generar nerviosismo.
Los Sevilla FC – SD Eibar nunca suelen ser partido fáciles y este no iba ser la excepción. Las rotaciones en el Sevilla por la carga de partidos llegaron incluso a sorprender. Óscar Rodríguez, Munir, En Nesyri y Óliver Torres, junto a Vaclik, fueron las grandes novedades en los de Lopetegui, que acumulo muchos jugadores de marcado perfil ofensivo ante uno de los equipos más tácticos y físicos de la categoría.
No le salió bien la apuesta a Lopetegui en la primera mitad. Sin un sólo jugador vertical en ataque, los nervionenses sólo lograron disparar una sola vez entre los tres palos y fue desde fuera del área. Le costaba en exceso desplegarse en ataque, con Diop y Sergio Álvarez muy aplicados en defensa además de Pozo y Arbilla en los laterales que recibían continuamente las ayudas de los extremos. Navas logró adentrarse por la derecha para encontrar a En Nesyri dentro del área, pero Paulo Oliveira desbarató la mejor ocasión sevillista de la primera mitad.
Las transiciones y la combinaciones rápidas del Eibar empezaban a hacer bastante daño al Sevilla. Pozo por la derecha estaba desbordando cada vez más y un centro del de Huévar al segundo palo estuvo a punto de introducirlo en propia puerta Jesús Navas. A las internadas de Pozo las iba a acompañar las conducciones por dentro de Bryan, que dejó algún que otro detalle sobre el césped. No hay decisión más incomprensible en el fútbol que no incluir la ‘claúsula del miedo’ en las cesiones.
El Sevilla no estaba jugando a absolutamente a nada. No había fluidez en el juego, no había verticalidad ni tampoco En Nesyri no estaba sabiendo interpretar el partido para darle pausa hasta poder asociarse con sus compañeros. Es que no había nada positivo a lo que agarrarse en 45 minutos terribles a los que el Eibar puso la guinda en una combinación rápida por la derecha que Kike García, tras sacarle las vergüenzas a Sergi Gómez, logró culminar con un auténtico movimiento de delantero.
Cuando no hay verticalidad la tienes que buscar. Fracasado el plan inicial de Lopetegui, el vasco tenía que agitar el árbol en busca de algo que de verdad le hiciera daño al Eibar. Entró Ocampos por Sergi Gómez para así retrasar a Gudelj al centro de la defensa y pasar a un 4-4-2 que empezó a dar resultado a los pocos minutos con una ocasión clarísima de En Nesyri, prácticamente sólo ante Dmitrovic tras un buen pase a la espalda de Munir, que mandó arriba dando muestras de que no puede ser el ‘9’ de este Sevilla.
El 4-4-2 rombo que planteó Lopetegui para el segundo acto activó a jugadores que no habían relucido en la primera mitad. Óscar Rodríguez se mostró mucho más participativo y con mayor sensación de peligro y a Navas se le vio percutiendo con más intensidad por la derecha, pero poco más. Munir se sintió más cómodo por dentro y creo mucho más peligro que En Nesyri en toda la primera mitad. No era el día del Sevilla, ni mucho menos.
El ímpetu sevillista volcó el campo hacia la portería de Dmitrovic, donde Oliveira y Burgos fueron dos auténticos antiaéreos que se encargaron de despejar cualquier balón con peligro que pasaba por el área del serbio. Viendo la dinámica del partido con el Eibar achicando aguas, Suso y Carlos Fernández intentaron darle algo de imprevisibilidad a los suyos. Con el gaditano consagrado como el hombre orquesta en ataque el equipo logró algo más de imprevisibilidad, pero es que sin un socio es imposible. Ocampos las pedía todas pero las erraba dando muestras de que no ha empezado bien la temporada y Carlos lo intentaba por todos los medios y fue protagonista en el final del encuento, con De Jong y Mudo Vázquez en el campo a la desesperada. El canterano logró conectar un buen centro de Navas en el descuento al que respondió bien Dmitrovic a córner y logró prolongarla en el saque de esquina posterior para que Ocampos, contra todo pronóstico, no acertase en el golpeo para mandarla fuera y sellar la segunda derrota consecutiva del Sevilla FC en LaLiga.
La resaca de la Champions le ha pasado factura a los de Lopetegui. La semana pasada fue la expulsión la que marcó el partido, pero hoy falló el planteamiento. Sin verticalidad en la primera mitad y con exceso de nerviosismo en la segunda, Lopetegui debe de cambiar cosas que no funcionan, que hay varias. Que Sergi Gómez siempre salgo en las fotos de los goles en contra o que Rakitic reste más que sume en el cómputo general son, entre otros aspectos, cosas que no cuadran. Y ahora Rennes y Athletic de Bilbao.
FICHA TÉCNICA
Alineación del Sevilla FC: Vaclik: Navas, Sergi Gómez (45′, Ocampos), Diego Carlos, Acuña; Gudelj, Rakitic (79′, Franco Vázquez), Óscar Rodríguez (69′, Suso); Munir (79′, De Jong), Óliver Torres y En Nesyri (69′, Carlos Fernández).
Alineación del SD Eibar: Dmitrovic; Pozo, Oliveira, Burgos, Arbilla; Diop, Sergio Álvarez, Kevin Rodrigues (61′, Sergi Enrich), Bryan Gil (85′, Bryan Gil); Inui y Kike García (72′, Edu Expósito).
Goles: 0-1 (41′, Kike García).
Árbitro: Hernández Hernádez (Comité Canario). Amonestó a Mendilibar, Edu Expósito, Rodrigues y Pedro León en el Eibar.