No pudo ser. El Sevilla FC no logró prolongar la racha de imbatibilidad de 18 partidos sin conocer la derrota en liga en su visita al Nuevo Los Cármenes. Una expulsión totalmente evitable de Jordán al filo del descanso decantó el partido hacia el lado nazarí. Yangel Herrera, a falta de diez minutos, selló la victoria para el Granada CF en un partido totalmente condicionado.
Cuando se juntan dos equipos tan trabajados por sus entrenadores suelen verse partidos más trabados. El Granada – Sevilla FC no iba a diferir mucho de esto salvo por su comienzo. La rapidez en la transición de los sevillistas les permitió tener en los pies de Suso la posibilidad de adelantarse en el marcador a los tres minutos de encuentro, pero el gaditano, que ya está asentadísimo en la mediapunta, no logró empalar bien el cuero y le salió un disparo mordido. La réplica de los nazaríes no tardó en llegar para redondear un comienzo de partido eléctrico. Milla, desde la frontal, se sacó un gran disparo de volea que tocó en un defensor y se fue a córner, propiciando la ocasión más clara para los de Diego Martínez en el primer acto. Los problemas de los de Lopetegui en las jugadas a balón en contra volvieron a aparecer y Germán logró hacerse hueco en el punto de penalti para cabecear, formándose una omelette dentro del área que logró sacar la defensa nervionense.
El eléctrico comienzo por parte de ambos equipos se iba a quedar ahí. El Sevilla entendía con el paso de los minutos que iba a ser el poseedor de la posesión ante un ordenadísimo Granada. Sin Ocampos sobre el césped, la principal vía de ataque sevillista era Jesús Navas, que en sus pocas intervenciones en la primera mitad logró ponerle un balón perfecto a Joan Jordán que este no logró direccionar a portería. Con la lección aprendida, Puertas y Carlos Neva se cerraron en banda para impedir, al menos, que el palaciego centrara con facilidad. Con Navas desactivado, el Sevilla se ahogaba y cortocircuitaba cuando lograba avanzar más allá del centro del campo. Iván Rakitic sigue sin dar el nivel que se espera de él y no lograba activar el juego interior ni con la ayuda de Suso, que fue el único generador de ventajas en el primer acto por parte de los sevillistas, que sólo se acercaron con peligro una vez más con un disparo de Munir desde la frontal que despejó Rui Silva a saque de esquina en el 32′ de partido.
La jugada polémica, por llamarla de alguna manera, iba a llegar al filo del descanso. Jordán vio dos amarillas en apenas minuto y medio totalmente justificadas. Primera un pisotón por detrás a un centrocampista del Granada y luego un ‘enganchón’ con Germán, al que le soltó la pierna, fueron las acciones que creyó González Fuertes para expulsar al sevillista. Otro colegiado no habría mostrado la segunda amarilla, pero el asturiano tiene un criterio un tanto extraño porque Munir fue cosido -literalmente- a patadas por Kenedy y no fue amonestado.
La racha de 18 partidos invictos en liga empezaba a tambalearse. La expulsión de Jordán a falta de toda la segunda parte iba a condicionar -y mucho- el partido para los sevillistas. Lopetegui intentó darle contundencia y pausa arriba con la entrada de Ocampos y De Jong al descanso y rápidamente iba a gozar de una ocasión clarísima. Munir, tras una galopada de Diego Carlos por la derecha, iba a enviar el balón a la madera para acabar lamentándose de errar ser la única ocasión sevillista de la segunda parte ante un Granada que olió sangre y se lanzó a por su presa.
Con el campo totalmente inclinado hacia la portería de Bono, lo único que le podía salvar al Sevilla era la falta de la calidad necesaria de los atacantes nazaríes para superar a la defensa y a eso se agarró. Machís encontró una brecha en la defensa para darle un pase de gol a Puertas que logró evitar el portero marroquí haciéndose grande delante del extremo granadino. El Granada seguía insistiendo tanto por la izquierda como por la derecha, con un Machís sin apenas descanso que estaba creando estragos por el costado diestro.
El cansancio de Munir propició la entrada de En Nesyri para, al menos, tener alguna oportunidad a la contra y a un hombre aplicado en la presión, pero en ataque no logró mostrarse por la dinámica que llevaba el partido. Por los nazaríes, Yangel Herrera le dio frescura al Granada en el último cuarto, que seguía machacando los costados sin suerte hasta que apareció el venezolano en segunda línea. Un centro bombeado de Foulquier al corazón del área fue cazado por Yangel para poner el esférico en la escuadra derecha de Bono pese al salto de Diego Carlos con el mediocentro en el 81′. Ese tipo de llegadas, desde la segunda línea, convierte que esos jugadores sean prácticamente indetectables para cualquier defensa.
Poco más de sí dio el partido en el Nuevo Los Cármenes. Los de Diego Martínez tiraron de la astucia y del ‘otro fútbol’ para restarle minutos al minutero y llevarse los tres puntos ante un Sevilla totalmente condicionado por la expulsión de Jordán. 18 partidos invictos en liga que se terminan por una doble amarilla muy evitable por el mediocentro catalán y por un cansancio bastante importante por el parón internacional aunque no haya tiempo para lamentarse. Stamford Bridge espera al Sevilla este martes. A seguir.
FICHA TÉCNICA
Once del Granada CF: Rui Silva; Foulquier, Domingos Duarte (44′, Vallejo), Germán, Carlos Neva; Montoro (75′, Fede Vico), Gonalons (60′, Machís); Kenedy (60′, Yangel Herrera), Milla, Puertas; y Soldado (74′, Luis Suárez).
Once del Sevilla FC: Bono; Navas, Sergi Gómez (85′, Franco Vázquez), Diego Carlos, Escudero (18′, Acuña); Fernando, Jordán, Rakitic; Suso (45′, Ocampos), Munir (70′, En Nesyri) y Carlos Fernández (45′, De Jong).
Goles: 1-0 (81′, Yangel Herrera).
Árbitro: González Fuertes (Comité Asturiano). Amonestó a Gonalons, Puertas y Fede Vico en el Granada. La vieron Fernando, Munir, Franco Vázquez y Jordán (en dos ocasiones) por parte sevillista.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 6 disputado en el Estadio Nuevo Los Cármenes.
