Se acabó el circo del derbi de Copa del Rey. Con dos errores y un final escrito por todo lo que acontecía al encuentro, el Sevilla cae eliminado en un Benito Villamarín sin público en el que el Real Betis fue superior durante casi los 90 minutos. El gol del Papu hizo soñar, el error de Alfonso en el gol de Fekir volvía las aguas a su cauce, el energúmeno del palo a Jordán formó un tsunami mediático y Canales, en la reanudación del encuentro, lo acabó definiendo todo.
Con diez bajas, que serían once durante tras el gol de Fekir por la agresión sufrida por Jordán, se presentaba el cuadro de Julen Lopetegui. El sevillismo era consciente de que pasar en el Villamarín iba a ser difícil, pero no tan largo. A los pocos minutos del comienzo del encuentro, el Betis pudo adelantarse tras una jugada ensayada de los de Pellegrini que se marchó al palo y Édgar, con una chilena espectacular, tuvo en sus botas el hacer el primero de la noche. Gudelj logró meter la cabeza para mandarla a córner que hacía respirar a Alfonso Pastor, que fue el gran señalado del encuentro.
La superioridad del Betis fue aplastante durante toda la primera mitad. La intensidad y los acercamientos fueron constantes mientras el Sevilla se las veía consigo mismo para lograr salir de la presión bética. Balones a Rafa Mir y a Ocampos y poco más de los de Lopetegui, que con una recuperación de Óliver Torres en campo rival sirvió para que el Papu adelantara a los suyos con un latigazo desde la frontal. El sueño estaba más vivo que nunca, pero poco tardó el club nervionense en despertarse. Una mala colocación de Alfonso Pastor en un saque de equina, Fekir se inventó un gol para la posteridad de los derbis desde la misma esquina del campo para igualar el duelo. Lo que pasó en la celebración del gol, con un energúmeno agrediendo a Jordán, el partido suspendido y las campañas mediáticas que se han hecho desde la noche del domingo hasta minutos antes del partido, ya lo conocen.
La reanudación del juego, en menos de 24 horas en el mismo escenario totalmente desierto, le dio alas a un Sevilla que recuperó a un trascendental Marcos Acuña. El argentino sustituyó a Jordán y Koundé entró por Gudelj, formando Lopetegui con tres centrales. Los nervionenses ganaron poso atrás, algo más de control en el centro del campo y la versión de los sevillistas mejoró con respecto a lo que se vio el sábado noche.
El Betis no bajó ni un ápice la intensidad y siguió apretando arriba, algo que el Sevilla logró superar con combinaciones con un Marcos Acuña trascendental en los sesenta minutos restantes. El gol en fuera de juego de Juanmi refrendaba la poca solidez de los nervionenses en la portería y en el 72′ Alfonso Pastor volvió a quedar expuesto a las críticas. Con un gran pase de Carvalho para Canales, el cántabro sacó un tiro centrado que el de Bujalance no logró despejar y supuso la remontada de los verdiblancos.
El Sevilla tuvo que irse arriba porque no le quedaba remedio, pero solo pudo agarrarse a la épica con un cabezazo de Koundé tras una gran falta botada por Marcos Acuña que se marchó al larguero. Los dos errores del meta sevillista tradujeron en el campo el final que estaba escrito. Del desenlace, de la polémica y de los inconvenientes ya se ha hablado.
FICHA TÉCNICA
Once del Real Betis: Rui Silva; Bellerín, Pezzella, Édgar, Álex Moreno; Guido, Carvalho; Canales, Fekir, Juanmi; y Borja Iglesias. Sabaly sustituyó a Bellerín el domingo.
Once del Sevilla FC: Alfonso; Montiel, Gudelj, Diego Carlos, Rekik; Jordán, Rakitic, Óliver Torres; Ocampos, Papu y Rafa Mir. Koundé y Acuña sustituyeron a Gudelj y Joan Jordán el domingo.
Goles: 0-1 (35′, Papu), 1-1 (39′, Fekir), 2-1 (72′, Canales).
Arbitraje: De Burgos Bengoetxea (Comité Vasco). Amonestó a Ocampos, Montiel y Koundé en el Sevilla. Vieron amarilla en el lado bético Fekir y Carvalho.