Nunca fue fácil, siempre hubo dudas. Desde la llegada a la capital hispalense de Julen Lopetegui, si ha habido un punto negro en algunos momentos de la temporada anterior y, en la actual, ha sido la falta de gol. Aún así, este equipo se envuelve en una competitividad en todas sus líneas, que pocas veces se ve a alguien que desafine.
Está demostrado que el punta nervionense está solo. Únicamente hay que observar la cantidad de centros que se generan desde las bandas por partido y ver como apenas hay apenas uno (delantero) esperando el remate. Al final, eso forma parte del plan: aprovechar las segundas jugadas, bordeando el área en busca de ese rechace rival para así pillar desordenado al contrincante y a partir de ahí construir y generar espacios con la segunda línea.
Este juego hace también evitar muchos contraataques de los rivales. Todo está muy trabajado. Y ese delantero que actúa como ‘boya’, de manera indirecta, hace que todo lo demás esté equilibrado. Quizás, la ausencia de tantos de Luuk o Carlos Fernández se deba a que el técnico no les demanda eso precisamente, si no ‘apoyar’ a la segunda línea.
¿Puede radicar el problema en el centro del campo? La falta de creatividad, ocasionada por la ausencia de Banega, tienen que hacer obligar a Lopetegui a jugar de manera diferente. Antes, la pausa, el mantenimiento de la pelota y velocidad en determinados momentos eran orquestados por Éver; ahora, necesita de soluciones diferentes más allá de los 12 o 13 jugadores habituales.
Obviamente no hay que cambiar todo el equipo cada encuentro, eso sería un desastre, pero sí modificar 2 y 3 piezas que permitan no ver lo visto ante Osasuna: falta de ideas por un cansancio de muchos de futbolistas del Sevilla. La temporada está siendo caótica y agotadora, pero sí, “es lo que hay” y hay que adaptarse. A la vuelta del parón, con Idrissi, Suso, Ocampos, Óscar, Jordán, Rakitic… debe Julen Lopetegui activar a toda la plantilla en fase ofensiva que permita llegar a los meses claves de la temporada con posibilidad de luchar por todo lo posible.