Un gran Sevilla FC doblega 2-0 al FC Barcelona en la ida de semifinal de la Copa del Rey. Idéntico resultado a los cuartos de final de la misma competición de hace dos temporadas. Los de Nervión fueron superiores y se encontraron con las mejores versiones de Jordán y Koundé. El francés marcó el primero vistiéndose del ’10’ rival, y el ’10’ local, Iván Rakitic, sentenció frente a su exequipo. Queda la vuelta.
En las grandes citas los asistentes visten de etiqueta. Lopetegui no es menos y “su once” particular saltaba a la alfombra de Nervión. El Papu Gómez saldría de inicio en la posición que parecía ser la incógnita tras la lesión de Lucas Ocampos: la banda izquierda. Por su parte, de Ronald Koeman sorprendía la suplencia del exjugador sevillista Lenglet, situando a Mingueza en el eje de la zaga y a Junior Firpo en el lateral diestro. Por lo demás, lo esperado. El 4-3-3 se dibujaba en el Sánchez-Pizjuán con colores blanquirrojos y blaugranas.
Ambos equipos eran una calcamonía en los primeros minutos en cuanto a idea de juego. Los dos querían el balón con posesiones largas. El Sevilla acumulaba muchos jugadores por dentro al cerrarse los extremos, mientras que el Barcelona incidía en la banda derecha con Dembelé. Y con este patrón no tardaron en tener la primera. El francés acumulaba muchos defensores y dejaba libre de marca a sus compañeros. Aprovechó esto y encontró a su compatriota Griezmann, quien alzó la cabeza y filtró por arriba a Messi, pero se topó con Bono. El portero marroquí sacó un pie estratoférico.
La réplica para los sevillistas la puso Koundé, tras rematar un pase atrás de Suso en el 17. Y el mismo “defensa central” se vistió del ’10’ visitante para sortear a todos los rivales que le defendían, para acabar definiendo como un killer ante Ter Stegen en el minuto 25 y hacer el gol sevillista. Este jugador está reinventando el fútbol. Está creando una posición nueva. A raíz del zarpazo, el Barcelona intentaba empujar, pero un Sevilla bien abrazado no permitía avance ninguno. A su vez, el control que reflejaba con un Joan Jordán sublime le daba alas para buscar el segundo. Y estuvo a punto de llegar por parte de Escudero al filo del descanso, pero el portero alemán dijo “no”.
En la segunda parte, Dembelé seguía siendo el centro de todas las miradas y el empuje del Barcelona era mayor. Messi se volvía a encontrar con el portero del Sevilla en el minuto 55. Ya era su segunda ocasión, y para los intereses de los de Nervión, era mejor no comprobar si el refrán se cumpliría. El minutero seguía dando vueltas y los entrenados por Lopetegui se mantenían férreos en el tú a tú. El vasco decidió mover el banquillo con un triple cambio: Rekik, De Jong y Munir por Escudero, En Nesyri y el Papu. Piernas frescas y más contención en el lateral zurdo.
Cada vez andaba más arropado el Sevilla, pero no concedían ni media. El juego estéril de banda a banda de los blaugranas con el objetivo de hacer llegar el balón al mosquito o a la pulga no sorprendía a los locales salvo por alguna genialidad individual. En el 80, Lopetegui agotaba sus cambios mientras Koeman no había movido ficha aún: Jordán por Gudelj y Suso por Óliver. Tres minutos después, el holandés buscaba en Riqui Puig algo de revolución en su equipo. Pedri fue el damnificado, quien no tuvo mucho protagonisto pese a su gran temporada.
Iván Rakitic, el croata con acento sevillano. Llegó procedente del FC Barcelona en verano y el verdugo no podía ser otro que él. En el minuto 85, Óliver envió un gran pase al hueco con el exterior para el ’10’ sevillista. Rakitic aprovechó el resbalón de Umtiti para presentarse ante Ter Stegen, levantar la cabeza y fusilar a su excompañero. No lo celebró, pero por dentro gritaba desgañitándose el alma. Tras el 2-0, Messi tuvo la tercera en una falta al borde del área, pero el refrán no se cumplió. El árbitro pitó el final y queda la vuelta en el Camp Nou para otra final de copa.
Ficha técnica
Once del Sevilla FC: Bono; Aleix Vidal, Koundé, Diego Carlos, Escudero (68′, Rekik); Fernando, Rakitic, Jordán (80′, Gudelj); Suso (80′, Óliver Torres), En Nesyri (68, De Jong), Papu Gómez (68′, Munir).
Once del FC Barcelona: Ter Stegen; Firpo, Mingueza, Umtiti, Jordi Alba; Busquets, De Jong, Pedri (85′, Riqui Puig); Dembelé, Messi, Griezmann.
Goles: 1-0 (25′, Koundé); 2-0 (85′, Rakitic).
Árbitro: Mateu Lahoz (comité de la Comunidad Valenciana). Amonestó a Jordi Alba. También a Jordán, Escudero y a Aleix Vidal.