Lo enterraron antes de tiempo y demostró, por enésima vez, que no pueden descartarlo jamás por muy adversas sean las circunstancias. Frente al resultado de la ida, al golpe psicológico de la última semana, a Haaland y al VAR, el Sevilla peleó hasta el 97′ para forzar una prórroga que no llegó. El noruego y En Nesyri hicieron los tantos de otro ejemplo más de resiliencia del Sevilla FC.
Hay que naturalizar el fracaso. En una sociedad donde Mr Wonderful se ha asentado como casi un modo de vida, los negativos -o así nos quieren llamar- somos el último reducto donde se refugia la aceptación de la derrota, de que no todo es posible. Los profesionales de la psicología siguen esta misma línea cuando reciben a sus pacientes y les hacen ver que no todo es felicidad y que para triunfar has tenido que caerte cuatropecientas mil veces.
No creía en el pase del Sevilla a cuartos porque dudaba que los nervionenses le hicieran tres goles al Borussia Dortmund. Estaba claro que los alemanes iban a marcar al menos uno y que para forzar la prórroga se iban a tener que anotar tres tantos, pero el plan de partido que planteó Lopetegui iba encaminado a que me equivocara. Más agresivo que nunca sin perder poso atrás, la primera mitad de los sevillistas solo tuvo el error de Koundé que acabó costando el primero de los amarillos por medio de Haaland como preveíamos. Óscar generando ventajas y dándole respiro a sus compañeros, Ocampos como en las mejores noches y un nivel de intensidad pocas veces visto en los de Lopetegui maniataron completamente a los alemanes. Lástima que la arrancada espectacular del argentino por la izquierda no acabase en gol de Suso al cuarto de hora del encuentro.
El 1-0 no alteraba en absoluto el plan de partido. Al Sevilla, prácticamente, le hacían falta el mismo número de goles para tener posibilidades y tampoco lo iba a alterar la entrada del VAR en el 48′ de partida en una escena digna del camarote de los Hermanos Marx. Haaland anotaría el segundo para el Dortmund en una acción que podía ser falta del noruego sobre Fernando. El VAR revisa pero no esa jugada que había acabado en gol, sino una bastante anterior en Koundé y el noruego que acabó siendo penalti del francés. Bono paró el penalti y el rechace a Haaland y un minuto después tuvo que recoger el balón de entre las mallas porque se repitió el penalti al haberse adelantado. Increíble pero cierto.
Cualquier equipo normal se hubiera caído después de semejante mazazo, pero el Sevilla no. Más que nunca tiró del ‘casta y coraje’ para levantarse de todo lo que le rodeaba y seguir empujando hasta que recortó distancias tras un claro penalti de Can sobre De Jong que En Nesyri transformó en el 68′, teniendo más de 20 minutos para anotar otros dos y forzar una prórroga que cualquier mortal, como el que les escribe, sabía que no iba a llegar.
Peleó y siguió peleando. Frente a la jugada sinsentido del penalti sobre Haaland, a Çakir y a los de la sala VOR. El Sevilla se enfrentó a todo y a todos y acabó cortándoles el cuerpo a los alemanes cuando En Nesyri, en el 95′, puso el 2-2. Las posibilidades estaban ahí e incluso pudo haber penalti en la última acción de la que Çakir se hizo el loco, pero si Diego Carlos hubiese tenido más maldad… Ay, si la hubiese tenido.
“Todo hombre debería perder una batalla en su juventud para no perder la guerra cuando sea viejo“. Esta frase de George RR Martin es oro puro. Caer, y más de esta forma, está permitido. Al Sevilla le faltan ciertas tablas que no tiene en Champions y sí en Europa League, donde tiene un aura que le hace superar cualquier situación adversa como le ocurre al Real Madrid con la Liga de Campeones. Experiencia, sabiduría y paciencia, que ya vendrán muchas noches importantes para los de colorao’.
Ficha técnica
Once del Borussia Dortmund: Hitz; Morey (90+4′, Meunier), Can, Hummels, Schulz; Bellingham, Delaney; Reus, Hazard (66′, Passlack), Dahoud; y Haaland.
Once del Sevilla FC: Bono; Navas, Diego Carlos, Koundé, Acuña; Fernando(85′, Rakitic), Jordán (59′, Jordán), Óscar Rodríguez (78′, Óliver Torres); Suso (85′, Suso), Ocampos (59′, De Jong) y En Nesyri.
Goles: 1-0 (35′, Haaland), 2-0 (53′, Haaland p.p), 2-1 (67′, En Nesyri p.p), 2-2 (95′, En Nesyri).
Arbitraje: Çakir (Federación de Turquía). Amonestó a Haaland, Can y Morey en el Borussia. Vieron amarilla en los sevillistas Koundé, Diego Carlos, Acuña, Jordán y Óscar Rodríguez.
Incidencias: Partido correspondiente a la vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones entre Borussia Dortmund y Sevilla FC en el Signal Iduna Park.