Los primeros compases del encuentro serían de previsibilidad total. El Sevilla implantaría un 4-1-4-1 con un Villarreal presionando muy arriba y obligando al Sevilla a jugar en largo. Ya desde el minuto 3, el conjunto submarino crearía peligro por su banda derecha y tras un córner que remataría Foyth y que rechazaría en última instancia Bono. Y así insistiría el Villarreal con un Chukwueze que mandaría un gran disparo al travesaño en el minuto 11′. No conseguía el conjunto nervionense anular las diagonales del jugador nigeriano.
Entre errores en la fase de creación y la verticalidad de Chukwueze, el Sevilla no conseguía monopolizar el juego y empezar a hilvanar ataques posicionales. Dominaba el Villarreal al término de los 15 minutos. Los pupilos de Julen Lopetegui empezarían a soltarse en ataque con un Papu eso sí que empezó a desempeñar la función de mediapunta con libertad de movimiento. Por el vendrían todas las acciones de peligro generando faltas, cayendo a banda, pisando zonas interiores. No obstante, Montiel también empezaría a profundizar en ataque ejecutando centros eso sí algo erróneos.
Ya en la segunda parte la tónica del encuentro serían muy parecida a la primera pero con ciertas diferencias. El Sevilla desde primera mano intentaría robar en campo contrario para así atacar con más claridad. No obstante, ya en el 56′ llegaría un gol en propia de Koundé que sería anulado por fuera de juego posicional de Boulaye Dia al obligar a saltar forzado a Koundé. Un susto que hizo que el Sevilla siguiera sin reaccionar en ataque, estando espeso, llano, especulando y sin verticalidad arriba.
Lopetegui daría aire fresco con tres cambios que terminaron de matar a un equipo que ya estaba muerto en lo mental y por ende en lo físico. El Villarreal, por su parte, seguía llegando con peligro y de las miles que tuvo la metió finalmente en el 86′ por mediación de Giovanni Lo Celso. 1-0 y apenas podía el conjunto nervionense hacer algo.
Se añadirían 6 minutos de descuento donde el Sevilla remaría en contramarea para intentar salvar algún punto. y, con épica, conseguiría amarrar un punto en la jugada final, en el último córner con todo el equipo arriba. Marcaría Koundé para resarcirse de su fallo anterior.
Un punto que no certifica su pase a Champions League y que no tapa el pésimo partido que han realizado los de Lopetegui en el aspecto ofensivo.