El Sevilla FC consigue una victoria importantísima de cara a sus aspiraciones ligueras en un Gran Derbi en el que el Betis adquirió un papel secundario desde prácticamente el inicio del encuentro. La solidez y la efectividad volvieron tras la mala imagen mostrada el pasado martes ante el Lille en Liga de Campeones, más si cabe a las puertas de un parón de selecciones en el que los recuerdos se prolongan en el tiempo.
La primera sorpresa saltaba tras conocer el once y los convocados que Julen Lopetegui elegía para este Gran Derbi en el Villamarín. A la ausencia de Rekik, con algunas molestias físicas, se le unía de forma inesperada la de Suso de quien no conocemos los motivos dada la política del Sevilla FC de no dar a conocer los partes médicos de los futbolistas. Fue Erik Lamela quien partió de inicio en un encuentro en el que el conjunto de Nervión comenzó mimando la pelota.
Sin duda una de las claves para llevarse este derbi fue tomar la iniciativa en el manejo de la pelota, ya que ambos conjuntos se sienten cómodos con el dominio de la posesión. El cuadro rojiblanco tomó esa iniciativa, con un Betis impreciso y desordenado atrás que no se mostró cómodo en el terreno de juego. Esos nervios en el equipo verdiblanco provocaron que Guido Rodríguez comenzara mostrar ese nerviosismo a través de entradas duras que le provocaron que Mateu Lahoz, colegiado del encuentro, le mostrara la primera amarilla del encuentro tan solo a los nueve minutos de juego.
El Sevilla FC, por su parte, tampoco supo aprovechar del todo ese dominio de la pelota del que gozó desde prácticamente el inicio del encuentro. El primer disparo a puerta del encuentro no llegó del lado visitante a pesar de ese control del juego. Nabil Fekir avisaba a Bono con un disparo con rosca que el guardameta marroquí pudo detener sin problemas. En el lado sevillista, Rakitic y Ocampos fueron los protagonistas del juego ofensivo. El croata repartiendo balones y dominando el juego en el centro del campo, y el argentino, como es habitual, encarando sin complejos y con descaro a la zaga verdiblanca. Pero la quizá ocasión más clara de la primera mitad llegó tras un pase de Gonzalo Montiel desde el costado que dejaba prácticamente solo a Rafa Mir frente a Claudio Bravo, y que no supo rematar correctamente.
También Rakitic con un cabezazo tras un centro de Ocampos tuvo la oportunidad de adelantar a los sevillistas antes del primer susto del encuentro. El VAR anulaba un gol de Héctor Bellerín por fuera de juego tras una internada por el costado izquierdo, que rápidamente anulaba el videoarbitraje. Pero sin duda la acción más relevante de la primera mitad y quizá del partido llegó al filo del descanso. Rafa Mir cazaba un balón filtrado en el centro del campo con metros por delante para correr, antes de que Guido Rodríguez le derribara, provocando así su expulsión, de la que Mateu no dudó en ningún momento.
Con esta ventaja numérica, el Sevilla FC se vino arriba y comenzó a acorralar a un Betis que se encerró atrás prácticamente desde el inicio del segundo acto. Dos ocasiones de Lucas Ocampos desde la frontal del área chica avisaban al conjunto verdiblanco de que la segunda parte se iba a disputar en su campo. Y el gol no tardó en llegar. Un balón retrasado tras una jugada ofensiva dejaba a Marcos Acuña con metros para armar un tremendo disparo que se marchó hasta el fondo de la red sin que Claudio Bravo no pudiera hacer nada.
El asedio se convirtió en realidad, con multitud de llegadas con peligro que no se materializaron. La mezcla de cansancio y de nervios por no rematar el partido provocaron que el Betis se estirara y saliera de la trinchera que había construido, buscando la portería de Bono. Juanmi avisó con un disparo peligroso que terminaría por marcharse fuera de la portería de Bono. La entrada de Óliver Torres y del Papu dieron electricidad y oxígeno al equipo, que pudo volver a tomar la iniciativa en el juego ofensivo y en las ocasiones de gol.
Rafa Mir tiraba fuera de nuevo un balón claro de cabeza tras un centro lateral de Gonzalo Montiel. Quizá el futbolista ex del Huesca fue la nota discordante de un partido en el que prácticamente la totalidad del equipo mostró una imagen positiva. Durante la recta final del encuentro, el conjunto de Nervión se limitó a mover la pelota por el terreno de juego sin que las ocasiones de peligro volvieran a hacer acto de presencia. Un disparo a balón parado de Tello que se marchaba por poco fuera fue la luz en el mar de sombras que fue la segunda mitad para los locales.
Victoria de vital importancia a las puertas de un parón de selecciones la de un Sevilla FC que vuelve a dar buenas sensaciones tras el varapalo del pasado martes en Liga de Campeones ante el Lille.
Ficha técnica
Real Betis Balompié: Claudio Bravo, Edgar, Pezzela, Alex Moreno, Bellerín, Guido Rodríguez, Guardado (Juanmi, 62′), Canales, Fekir (Joaquín, 88′), Rodri (Tello, 62′), Willian José (William Carvalho, 45′).
Sevilla FC: Bono, Montiel, Koundé, Diego Carlos, Acuña (Augustinsson, 87′), Fernando, Jordán (Óliver Torres, 75′), Rakitic (Delaney, 80′), Lamela (Papu Gómez, 75′), Ocampos, Rafa Mir (Munir, 80′).
Goles: Marcos Acuña (0-1, 55′), Héctor Bellerín (0-2, p.p, 80′)
Árbitro: Mateu Lahoz amonestó a Guido Rodríguez (9′ y 45′), Diego Carlos (30′)