El Sevilla FC se despide de una Champions League para el olvido. No hace mucho que la idea de poder dar un paso más en la máxima competición continental se veía cercana. Sin embargo, nada más allá de un espejismo. Por segundo año consecutivo, los rojiblancos vuelven a acumular más sombras que luces en su paso por la fase de grupos y despedirán la competición sin nada que jugarse en el Etihad Stadium.
Al igual que la temporada pasada, los sevillistas se marcharán a competir en la Europa League. Con el tercer puesto asegurado, más allá del posible premio económico, el duelo ante el Manchester City se disputará con las posiciones del grupo ya decididas. Revertir la imagen ofrecida en los últimos partidos, único aliciente de un partido que es mero trámite.
Aunque de forma corporativa se dé a entender que todos los focos están puestos en el encuentro de esta noche, a nadie se le olvida que este fin de semana tendrá lugar uno de los derbis menos oportunos —por el gran estado de forma del rival— que se recuerdan. Los de Jorge Sampaoli visitarán el Benito Villamarín este domingo, por lo que no sería de extrañar que se reservasen jugadores para la importante cita ante los verdiblancos. Youseff En-Nesyri continúa lesionado, uniéndose así a las bajas ya conocidas de Tecatito Corona, Fernando Reges y Tanguy Nianzou.
Pese al hito de conseguir tres clasificaciones consecutivas para Champions League como cuarto clasificado de LaLiga, el Sevilla FC ha sido incapaz de brillar en Europa. El año pasado, a pesar de contar con un sorteo favorable con rivales de menor entidad, los de Julen Lopetegui fueron incapaces de pasar de ronda. Esta temporada, la historia se vuelve a repetir, acumulando como triste bagaje una sufrida victoria ante el FC Copenhagen.
El Manchester City, que tampoco se juega nada en este partido, no podrá contar con Haaland. El noruego se había convertido en toda una ‘bestia negra’ para el Sevilla FC, acumulando en sus tres enfrentamientos —con Borussia Dortmund y el propio Manchester City— la friolera de seis goles anotados.
Los sevillistas se despiden de la máxima competición continental en puestos de descenso. Un adiós sin fecha de retorno. Al menos, a corto plazo. La ilusión que siempre genera disputar la Europa League, única esperanza a la que agarrarse.