Nemanja Gudelj (Belgrado, 1991) es ese tipo de jugador que todo entrenador quiere tener. Rendimiento inmediato y polivalencia desde que puso un pie en Sevilla, es el jugador número doce para un Lopetegui que está encontrando en él todo lo que le están quitando las lesiones y los baches en el camino.
El serbio atendió a Sevillismo para contarnos cómo ha sido su interesante paso por la liga china y lo que supuso para él, su polivalencia desde muy joven en el NAC Breda, su relación con Fernando y muchos apuntes tácticos sobre las posiciones que ocupa en el Sevilla.
Bueno, Nemanja. ¿Qué nos puedes decir de tu primer año en Sevilla?
Fui recibido muy bien por parte del club y por parte de los aficionados. Todo se me hizo muy fácil aquí en Sevilla. Muy pronto empecé a jugar en el ritmo en el que quería jugar y eso fue gracias al buen recibimiento que tuve.
Repasando tu carrera, hemos podido ver que una parte de tu carrera la has desarrollado en China. ¿Qué le lleva a un futbolista a irse a un país con tan poca tradición futbolística a salir del Ajax para marcharse allí?
Fue un traspaso que no lo tenía previsto años antes de irme pero a veces en la vida te llegan algunas cosas que tienes que valorar, que hablar con la familia… Hasta que me fui a China jugué todos los minutos en los dos años que estuve. Llegó un entrenador que para mi tipo de fútbol no le iba bien y por eso me fui. El club no quería que me fuese pero tenía una edad en la que necesitaba jugar y me sentía fuerte. Tenía varias opciones en Inglaterra, España, Italia o Alemania, pero me llegó una oferta de China y claro… Ir a China en esa edad no es natural, pero el dinero que me ofrecieron, una experiencia que tal vez no la vayas a tener nunca… Todo eso hizo que fuera a China. Yo confiaba mucho en mí mismo a la hora de no caer de nivel. Tácticamente sabía que no iba a caer porque hablaba mucho por mi padre y conocía a Fabio Cannavaro, que fue mi entrenador. Tácticamente ha sido uno de los mejores jugadores del mundo del fútbol y como entrenador se ve que también. En esos dos años que estuve me hizo mucho mejor futbolista. Me hablaba de cómo Pirlo jugaba de ‘seis’ y eso me enseñó mucho. Físicamente también sabía que iba a entrenar muy fuerte y si sabía que podía dar más me quedaba en el gimnasio. El ritmo de fútbol sí es diferente ya hay menos partidos, porque se juega una vez por semana, pero sabía que me iba a adaptar muy rápido. La liga china era una liga bastante fuerte y había jugadores muy buenos. Los primeros cinco o seis clubes que juegan para ganar la liga son equipos muy fuertes y hay jugadores como Hulk y Óscar. Son clubes serios.
Pasemos a una parte más analítica. Es curioso, porque en tu carrera te has desenvuelto más como mediocentro o volante que de pivote defensivo, que es donde más minutos has jugado esta temporada. ¿Cómo fueron esas primeras sensaciones?
Siempre me he sentido pivote. En el AZ o con Cannavaro jugábamos con dos pivotes y yo tenía la libertad de subir porque sabía que mi compañero se quedaba atrás. En el Sevilla jugamos con uno, pero para mí no es nada nuevo, solo que tienes menos libertad para subir porque tienes que cuidar lo defensivo mucho más que pensar en marcar un gol. Ahí es donde me siento más cómodo. Luego Lopetegui vio que podía jugar de central porque en el Breda, cuando era muy joven, me ponían ahí ya que veían que tenía toque de balón, físicamente estaba bastante fuerte y defensivamente no tenía problemas porque tácticamente estaba bien. Eso lo ha visto Lopetegui en el campo y yo también me siento bien ahí. Sé donde meterme, cómo jugar, leer lo que quiere el delantero… Eso ha ayudado también porque hablo con mi padre y me ha ayudado mucho.
¿Cómo asimila un futbolista que por la competencia en su zona tiene que ocupar diferentes zonas del campo? Llegaste como mediocentro, pero has jugado como pivote, como central…
Yo veo bastante bien tener compañeros fuertes porque te hacen crecer. En este año y medio he mejorado mucho como futbolista y eso es gracias los compañeros que me han exigido dar mi mejor versión. El Sevilla tiene muchos partidos, y por lo que está pasando por la COVID tenemos partidos cada tres días, viajes largos… Sabes que vas a jugar más de la mitad de los partidos. El año pasado jugué menos de lo que esperaba en los primeros partidos y luego, cuando empecé a jugar, me sentía muy bien y estaba contento con lo que jugaba. Jugué bastante bien, creo, y Fernando tiene una edad en la que no puede jugar partidos cada tres días. Es un gran compañero, un amigo y un grandísimo futbolista. A veces juego con él, a veces nos cambia a uno u otro, otras jugamos con tres atrás… Hay muchas oportunidades durante la temporada.
Lo más impresionante, después de tantas posiciones nuevas para ti, es que siempre has mantenido un nivel notable…
Lo más importante ahí, en ese triángulo entre pivotes y centrales, es lo táctico. Quiero agradecer a todos los entrenadores que he tenido como Frank De Boer, Marco Van Basten, Cannavaro y ahora Lopetegui, que son muy buenos tácticamente. Un futbolista que es bueno tácticamente puede jugar en todas las posiciones del campo y puede sacar un seis.
Al final, los futbolistas tan polivalentes son los que más le gustan a los entrenadores. ¿Cómo es el trato con Lopetegui?
Con Lopetegui me llevaba muy bien desde el primer día. Tenía mucha confianza en él y hablamos antes de firmar. Cuando llegué a Sevilla y en los primeros partidos no jugué mucho, hablé con él para saber que tenía que hacer para jugar más, si tengo que mejorar algo… Él me dijo que me iba a llegar mi momento y que tenía mucha confianza en mí. El inicio de la temporada fue así y no me veía en ese momento. Yo le dije que iba a seguir entrenando igual y esperando mi momento para cogerlo. Después de algunos partidos Lopetegui empezó a necesitarme y yo estaba listo. Desde ese momento a veces me necesita entre centrales, otras al lado de Fernando o yo de pivote. Él me ve como un pivote, pero también ve que puedo jugar en más posiciones y eso lo ven bien todos los entrenadores.
Sobre Fernando iba la siguiente pregunta. Muchos de los que seguimos al Sevilla pensamos muchas veces que sería de Gudelj si no hubiera estado Fernando…
A veces leo los mensajes y veo que hablan de lo que hemos costado ambos y me río. Es bueno leer a veces que hablan bien de ti. Fernando es un buen compañero y un gran futbolista. Tiene cuatro años más que yo y sigo aprendiendo de él. En el nivel en el que él está jugando y a esa edad tengo mucho respeto por él. Agradezco que la gente no vea la diferencia cuando él no está porque quiere decir que yo también estoy en un nivel bastante alto.
Los resultados dispares en este arranque han creado cierto nerviosismo. ¿A qué cree que se deben?
En liga hemos tenido unos partidos que deberíamos de haber ganado y no lo hemos hecho. El partido ante el Athletic en el que vamos ganando y perdemos en 15 minutos por nuestra culpa. No estuvimos concentrados y perdimos tres puntos. Ante el Eibar en casa jugamos muy bien pero nos faltaron oportunidades. En un momento en el que nos desconcentramos cinco minutos nos marcan un gol. Eso es la liga. Hay que estar concentrado todo el partido y eso es muy difícil. Nosotros somos profesionales y tenemos que hacerlo. Hemos perdido puntos difíciles pero los hemos recuperado bastante bien y poniendo al Sevilla donde tiene que estar.
¿Puede ser la falta de descanso?
La razón no la sé. Puede ser que sea el descanso porque hay jugadores que no han descansado ni dos semanas. También creo que somos profesionales y sabemos que tenemos que descansar entre el poco tiempo que tenemos entre partidos. Somos personas y durante los partidos ocurren momentos de falta de concentración y eso te lleva a cometer errores. Lo más importante es que esto ocurra lo menos posible y que el equipo contrario lo haga más que tú. Ahí hemos dado un paso y en muchos partidos sí que lo hemos hecho y hemos aprovechado que han cometido un error para aprovecharnos. Cuando presionas mucho a un equipo y controlas mucho el balón y ellos tienen que defender todo el rato, el momento en el que ellos fallan lo tenemos que aprovechar. Muchas veces hemos ganado porque tenemos el físico para llegar al minuto 95 con todo. El rival está más cansado en el final y se relajan un poco.
¿Un objetivo a nivel individual?
Dar mi máximo, acabar la temporada y decir que lo he dado todo y he ayudado a mi equipo. Espero jugar lo máximo y me siento físicamente bien. Creo que estoy jugando a buen nivel y quiero mantenerlo. Como equipo, quiero ganar lo máximo posible, entrar en Champions, ganarla… Nosotros vamos poco a poco y lo más importante para mí es el equipo.