La situación actual que atraviesa el club va más allá de lo deportivo. En lo extradeportivo, la entidad hispalense como empresa S.A.D que es, estimada por la ley, está viviendo una desprofesionalización departamental en varios departamentos internos que se lleva gestando desde hace un par de años.
La ausencia de personas con un carácter profesional y una formación que lo avale son el pan de cada día en un consejo de administración que por hechos pasados y presentes avalan su inoperancia y la incapacidad en tomas de decisiones que son cruciales tanto en temas deportivos como en temas extradeportivos.
Sin duda alguna el Sevilla FC ha vivido una regresión en muchos de sus departamentos si lo comparamos años atrás. La falta de la figura de un CEO es crucial para entender esto mismo que estoy contando. Toda la toma de decisiones que se ha vivido estos últimos 2 años denotan sin ninguna duda falta de previsión y profesionalidad más propia de un club amateur que de élite.
Revolución en la perspectiva del club
El club se ha quedado muy atrás en temas de innovación e imagen de marca. Para lo que puede ofrecer el Sevilla por su posicionamiento en España y lo que ha dado de sí en Europa a nivel de títulos, la marca Sevilla FC se puede explotar aún más sin perder los valores del club.
Es necesario readaptar la marca a lo que los tiempos presentes piden sin dejar ni olvidar lo que es el club y quién lo apoyo desde siempre, es decir, sus aficionados.
“No hay ningún elemento tan global como el fútbol; en todas partes es el deporte que más crece.” los equipos de fútbol valen hoy más que ayer” y que el fútbol “es una industria atractiva para invertir, porque crece decía Ferran Soriano, CEO de City Football Group en una conferencia muy interesante.
Si es cierto que hay que ser radical a la hora de contar con un capital extranjero que desestabilice al club, pero hay un gran repertorio de recursos para reconducir a la entidad en cuanto a dotarla de profesionalidad por lo menos en puestos estratégicos.
El principio de Peter
El principio de Peter asegura que un trabajador en una empresa con un sistema jerárquico tiende a ser ascendido hasta llegar a un punto donde se muestra un grado alto de incompetencia.
No es por ser populistas ni por predicar lo que se habla por redes sociales, pero actualmente, lo venía comentando hace un par de días. Dentro de las altas esferas y las cábalas superiores hay una doble espiral de ego y avaricia posicional.
Si vemos el consejo de administración actual, este está conformado por 9 consejeros de los cuales 6 son de diferentes familias que conforman la rimbombante lucha de accionistas que lleva inmersa el Sevilla desde hace años.
Y es que, el episodio de la ya seguramente destitución de Lopetegui lo resume todo. Falta de autoridad, mucha improvisación y sobre todo, las formas que se han visto a la hora de tratar a Julen Lopetegui.