En plena sierra gaditana, un 28 de septiembre de 1992, Luis Alberto iría forjando la figura de un jugador, o más bien de un mago, de un metrónomo, capaz de paralizar el tiempo en el verde, como cuando de pequeño lo hacía con el balón junto al paraje de los Alcornocales, para deleitarnos con un fútbol que pocos ven, que todos aman, y que realmente es atractivo.
El de San Juan de Valle es tiene un AS pegado a las botas y como buen mago, nunca desvela sus trucos. Aunque, todos ellos han seguido una figura a la que enfocar su juego y es ahí donde entra en escena “Mágico Gonzalez”, leyenda gaditana con la cual Luis Alberto está muy ligada. Con una melena peculiar, Luis Alberto desde los rincones más recónditos de la Toscana hasta Sicilia ha enamorado al forofo italiano al son del vino de Jerez, de la esencia de los pueblos blancos de la Cádiz Rural…
Una evolución constante en su posicionamiento
En comparación con las pasadas dos o tres temporadas, el gaditano ha ido tendiendo a recaer para la izquierda, donde con su piernas buena y cambiada, la derecha, se siente cómodo tanto comenzando en la salida de balón como en los 3/4 de campo donde es un gran receptor y enlazador de transiciones ofensivas. No obstante, esta nueva demarcación le ha hecho explotarse más en ataque ya que años atrás, al estar más centrado en la zaga, tenía que cumplir ciertas tareas defensivas.
Es por tanto que la figura de Luis Alberto se ha ido acrecentando durante los últimos años a base de marcar el tempo del partido, tanto para proyectar a sus compañeros en ataque como para adormilar el juego y hacer pasar el tiempo.
El péndulo del equipo
Sin duda alguna, todo balón que rueda en la sala de máquinas está destinado a pasar por las botas de Luis Alberto donde estas mismas imprimirán velocidad y seguridad al mismo tiempo, descaro y verticalidad en ataque y precisión y temple en la salida de balón.
Además, las estadísticas le acompañan. Según One versus One, el gaditano se encuentra en el TOP 1 de pases decisivos fuera del área en la Serie A, con 55 en total. No obstante, también ocupa el TOP 10 de ocasiones creadas y pases en progresión de ataque con una media de 0.74 por partido.
Otras de las más interesantes son sus tiros a puerta por partido, con 0.91 y seguido de ello sus expected goals, con 0.17 cada 90 minutos. Todo lo dicho anteriormente avalan sin duda alguna la importancia de Luis Alberto en fase ofensiva y en las transiciones defensa-ataque.
Donde pone el ojo, pone el pase
Definición perfecta para lo que hace en las transiciones defensa-ataque. El mediocampista ayuda a salir con el esférico pegado desde atrás por mediación de pases filtrados a los movimientos interiores de sus compañeros, o con conducciones que sorteen rivales para así comenzar una transición ofensiva.
No en vano, como Banega y otros muchos lo hacen, erran de vez en cuando en la salida de balón puesto que arriesgan continuamente en busca de pases que quiebren líneas enemigas, lo que puede llevarte a la hecatombe si fallas o al estrellato si aciertas.
Además, esa misma visión de juego a la par de una inteligencia táctica hace que arrastre y fije jugadores a su demarcación, lo que produce que se abran espacios por otro lados. Esto se ve asiduamente en la banda izquierda de la Lazio, por donde parte desde inicio.
No obstante, tambien interfiere en pasillos interiores del centro del campo, o bien incrustándose entre los centrales para darle dinamismo al juego o para ser el cerebro y el cabecilla de las operaciones en ataque, además de estabilizar el juego con cambios de orientación, desprendimiento de juego de exterior a interior.
Explotando sus virtudes ofensivas
El zaguero español explota asiduamente una de sus especialidades, el tiro lejano. En muchas ocasiones, cuando tiene espacio, arma su diestra desde la frontal del área y conecta un disparo con muchos repertorios, tanto colocado a la mismísima escuadra como con potencia y raso al palo más lejano. Sin duda alguna, nos tiene acostumbrado a verlo todas las semanas en los Highlight de la semana.
Pero eso no es todo de sus especialidades. Unas “de la casa” es la facilidad que tiene a la hora de filtrarse por pasillos interiores para entrar en segunda línea, pasar desapercibido, e incidir en ataque con goles. Y también a la hora de filtrar pases al interior del área a recepción de los desmarques de ruptura de sus compañeros.
Otras de las cualidades del gaditano es la de recibir entrelíneas, aprovechando los espacios entre los pivotes y la retaguardia. Y, a partir de ahí, decide con mucho éxito las acciones ofensivas. Es por eso que le llaman el “anti-pivotes”.
Luis Alberto, el camino de un canterano cualquiera
Como cualquier otro canterano, la figura de Luis Alberto ha sido intrascendental futbolísticamente hablando para la calidad que consagran sus piernas. Si es cierto que su fichaje por el Liverpool trajo a las arcas del Sevilla FC alrededor de 10 millones de euros, pero, comparado con su rendimiento actual en la Lazio, muchos se arrepienten de su salida de Nervión.
Este movimiento de fichas ha recordado mucho al que se viene próximamente, el fichaje de Bryan Gil por el Tottenham Hotspur. Una de las actuales perlas de la cantera, como lo sería Luis Alberto halla por el 2010, se marchará a la Premier League por 25M€ más el traspaso de Erik Lamela.
Con esto los sevillista se preguntan si el de Barbate seguirá los mismos pasos que el de San José Del Valle, llegar al estrellato y aumentar mucho más su valor de mercado. Ahora, el Sevilla, para repatriar a Luis Alberto necesitará entre 40 y 50 millones de euros, pero, ¿cuántos necesitará dentro de unos años con Bryan Gil?.
Muchos se preguntan lo mismo y todos responden igual: la cantera del Sevilla ya futbolísticamente no llega al nivel que requiere, o más bien no se amolda a lo que busca actualmente el primer equipo.
Eso sí, económicamente si ha ayudado a sanear pérdidas a la vez que inversiones en jugadores, véase las salidas de José Antonio Reyes o Jesús Navas.